Si crece eléboro, es posible que haya notado un fenómeno interesante. Los heléboros que se vuelven verdes de rosa o blanco son únicos entre las flores. El cambio de color de la flor de eléboro es fascinante y no se comprende perfectamente, pero sin duda genera un mayor interés visual en el jardín.
¿Qué es Hellebore?
Hellebore es un grupo de varias especies que producen flores de floración temprana. Algunos de los nombres comunes de las especies indican cuándo florecen, como la rosa de Cuaresma, por ejemplo. En climas más cálidos, obtendrá flores eléboro en diciembre, pero las regiones más frías las verán florecer a fines del invierno hasta principios de la primavera.
Estas plantas perennes crecen en grupos bajos, con las flores disparándose por encima del follaje. Florecen colgando de la parte superior de los tallos. Las flores se parecen un poco a las rosas y vienen en una gama de colores que se intensifican a medida que la planta envejece: blanco, rosa, verde, azul oscuro y amarillo.
Hellebore cambiando de color
Las plantas y flores de eléboro verde se encuentran en las últimas etapas de sus ciclos de vida; se vuelven verdes a medida que envejecen. Si bien la mayoría de las plantas comienzan en verde y se vuelven de diferentes colores, estas flores hacen lo contrario, especialmente en aquellas especies con flores blancas a rosadas.
Tenga la seguridad de que su cambio de color eléboro es perfectamente normal. Lo primero que hay que entender sobre este proceso es que lo que ves que se pone verde son en realidad sépalos, no pétalos de la flor. Los sépalos son estructuras en forma de hojas que crecen en el exterior de una flor, probablemente para proteger la yema. En eléboros, se les conoce como sépalos petaloides porque se parecen a los pétalos. Al ponerse verde, es posible que estos sépalos permitan que el eléboro realice más fotosíntesis.
Los investigadores han determinado que el enverdecimiento de los sépalos eléboro es una parte del proceso conocido como senescencia, la muerte programada de la flor. Los estudios también muestran que hay cambios químicos que acompañan al cambio de color, específicamente una disminución en la cantidad de pequeñas proteínas y azúcares y un aumento en las proteínas más grandes.
Aún así, aunque se ha explicado el proceso, todavía no está claro exactamente por qué ocurre el cambio de color.