Recolectar semillas de frutas y verduras de la huerta puede resultar económico, creativo y divertido para un jardinero. Guardar semillas de melón de la cosecha de este año para plantar en el jardín del próximo año requiere planificación y atención al detalle. Siga leyendo para obtener consejos sobre cómo recolectar semillas de melones.
Recolectando semillas de melones
Los melones son miembros de la familia del pepino y son polinizados abiertamente por el viento o los insectos. Esto significa que los melones se polinizan de forma cruzada con otros miembros de su familia. Antes de comenzar a guardar semillas de melón, asegúrese de que las especies de melón que desea propagar no estén plantadas a menos de media milla de otros tipos de melones.
Las semillas de melón crecen dentro de la fruta carnosa. Espere hasta que las frutas estén completamente maduras y separadas de la vid antes de recolectar semillas de melones. En el melón, por ejemplo, busque una red gruesa y un olor acre a melón en el extremo del tallo.
Para comenzar a guardar las semillas de melón, corte la fruta a lo largo y saque las masas de semillas en un frasco. Agregue un poco de agua tibia y deje que la mezcla repose durante dos a cuatro días, revolviendo diariamente.
Cuando las semillas de melón se asientan en el agua, fermentan. Durante este proceso, las semillas buenas se hunden hasta el fondo del frasco mientras que los detritos flotan hacia la parte superior. Para recolectar semillas de melones, vierta el agua que contiene la pulpa y las malas semillas. Ahora aprendamos cómo conservar las semillas de melón para futuras siembras.
Almacenamiento de semillas de melón
La recolección de semillas de melón es una pérdida de tiempo a menos que aprenda a conservar las semillas de melón hasta el momento de la siembra. Secar bien las semillas es la clave. Después del proceso de remojo, ponga las semillas buenas en un colador y lávelas para limpiarlas.
Extienda las semillas buenas sobre una toalla de papel o una malla. Deje que se sequen durante varios días. Almacenar semillas de melón que no están completamente secas da como resultado semillas mohosas.
Una vez que las semillas estén muy secas, colóquelas en un frasco de vidrio limpio y seco. Escriba la variedad de semillas y la fecha en una etiqueta y péguela al frasco. Coloque el frasco en el congelador durante dos días y luego muévalo al refrigerador.