¿Quién no disfruta de la intensa fragancia y belleza de las lilas? Estos favoritos pasados de moda son maravillosas adiciones a casi cualquier paisaje. Sin embargo, la poda periódica es vital para mantener las lilas sanas y con el mejor aspecto. Aunque hay variedades más pequeñas, de unos diez a quince pies (3-4.5 m), muchas lilas pueden alcanzar alturas de unos treinta pies (9 m) sin una poda regular. Podar los árboles de lilas con regularidad evita que se vuelvan demasiado altos e inmanejables.
Cómo podar los arbustos de lilas
Al podar lilas, cortar la parte superior de los tallos demasiado crecidos a menudo no es suficiente. Generalmente es mejor cortar todo el tallo. La mejor forma de recortar las lilas es con tijeras. Retire las flores gastadas hasta los tallos para evitar la siembra y fomentar más flores más adelante. Recorta aproximadamente un tercio de las ramas. Corte los brotes que crecen cerca del suelo y que puedan estar brotando del tronco principal. Para mejorar la circulación del aire o permitir que se filtre más luz, puede ser necesario recortar las lilas dentro de las ramas internas.
Sin embargo, si los arbustos de lilas ya son demasiado grandes o se vuelven antiestéticos, puede ser necesario podar todo el arbusto o árbol a unas seis u ocho pulgadas del suelo. Tenga en cuenta que es posible que deba esperar a que aparezcan las flores, ya que se necesitan unos tres años para que se desarrollen una vez que se ha cortado todo el arbusto.
Cuándo podar los arbustos de lilas
Es importante saber cuándo podar los arbustos de lilas. La mayoría de las lilas no requieren poda hasta que alcanzan entre seis y ocho pies (2-2.5 m) de altura. El mejor momento para podar los arbustos de lilas es justo después de que haya cesado su floración. Esto permite que los nuevos brotes tengan suficiente tiempo para desarrollar la próxima temporada de floraciones. Podar las lilas demasiado tarde puede matar los brotes jóvenes en desarrollo.
Si está podando árboles o arbustos lilas por completo a unos centímetros del suelo, es mejor hacerlo a principios de la primavera. Se desarrollarán nuevos brotes durante la temporada de crecimiento regular siempre que queden algunos brotes sanos. Una vez finalizada la temporada de crecimiento, elimine los brotes feos.
La poda de los arbustos de lilas es importante para su salud y producción de flores. Las lilas son generalmente bastante resistentes y si se realiza una poda adecuada, volverán más fuertes que nunca.