Cuidar un árbol de Navidad vivo no tiene por qué ser un evento estresante. Con el cuidado adecuado, puede disfrutar de un árbol de aspecto festivo durante la temporada navideña. Veamos cómo mantener vivo un árbol de Navidad durante las vacaciones.
Cómo mantener vivo un árbol de Navidad
Mantener un árbol de Navidad vivo y saludable durante la temporada navideña es más fácil de lo que uno podría pensar. Cuidar un árbol de Navidad vivo no requiere más esfuerzo que un jarrón de flores cortadas.
El aspecto más importante del cuidado del árbol de Navidad vivo es el agua. Esto es cierto tanto para los árboles cortados como para los árboles de Navidad vivos (cepellón intacto). El agua no solo mantendrá vivo al árbol, sino que también evitará problemas de seguridad asociados con la desecación. La ubicación es otra consideración importante. El lugar donde se coloca el árbol en el hogar determina su longevidad.
Cortar el cuidado del árbol de Navidad
Los árboles recién cortados durarán más si se aplican algunas pautas simples. Primero, debes aclimatar el árbol antes de llevarlo directamente a tu casa. Pasar de un extremo a otro, como un ambiente exterior frío al interior con calefacción, puede causar estrés en el árbol, lo que resulta en sequedad y pérdida prematura de agujas. Por lo tanto, es mejor colocar el árbol en un área sin calefacción, como el garaje o el sótano, durante uno o dos días antes de llevarlo adentro.
A continuación, debe volver a cortar el árbol aproximadamente una pulgada por encima de la base. Esto ayudará al árbol de Navidad a absorber el agua más fácilmente.
Finalmente, asegúrese de que el árbol de Navidad esté colocado en un soporte adecuado con abundante agua. Dependiendo del tamaño, la especie y la ubicación de su árbol de Navidad, puede requerir hasta un galón o más de agua durante los primeros días en el hogar.
Seguridad del árbol de Navidad en vivo
Ya sea cuidando un árbol cortado vivo o uno vivo, prevenir la sequedad es clave para la seguridad del árbol de Navidad vivo. Por lo tanto, es importante mantener el árbol bien regado y controlar los niveles de agua a diario. Un árbol de Navidad bien regado no presenta ningún riesgo de incendio. Además, el árbol no debe ubicarse cerca de ninguna fuente de calor (chimenea, calentador, estufa, etc.), lo que provocará el secado.
También es una buena idea mantener el árbol en un lugar donde sea menos probable que lo derriben, como en una esquina u otra área poco transitada. Asegúrese de que todas las luces y cables eléctricos también estén en buenas condiciones de funcionamiento y recuerde apagarlos cuando se acueste por la noche o cuando se vaya por períodos prolongados.
Cuidado del árbol de Navidad vivo
Los árboles de Navidad vivos pequeños generalmente se guardan en un recipiente con tierra y se tratan como una planta en maceta. Se pueden replantar al aire libre en primavera. Los árboles de Navidad vivos más grandes, sin embargo, generalmente se colocan en un soporte para árboles de Navidad u otro recipiente adecuado. El cepellón debe humedecerse bien y mantenerse de esta manera, regando según sea necesario. La consideración más importante con los árboles vivos es su tiempo de permanencia dentro de la casa. Estos árboles nunca deben mantenerse en interiores durante más de diez días.