Los helechos son excelentes plantas de jardín o macetas. Dependiendo de la variedad, pueden prosperar en la sombra, con poca luz o con luz indirecta brillante. Cualesquiera que sean sus condiciones interiores o exteriores, probablemente haya un helecho adecuado para usted. Siempre que lo mantenga bien regado, su helecho enterrado o en maceta debe recompensarlo con un follaje espectacular y amplio. Sin embargo, al igual que con la mayoría de las plantas, especialmente las que están en macetas, los helechos superarán su ubicación si se les da suficiente tiempo. Siga leyendo para obtener más información sobre la separación de helechos y cómo dividir las plantas de helechos.
Cómo dividir las plantas de helecho
Como regla general, los helechos deben trasplantarse o dividirse cada 3 a 5 años. Si su planta comienza a extinguirse en el medio y produce hojas más pequeñas, es probable que haya superado su espacio de contenedor o jardín.
Es posible simplemente moverlo a un recipiente más grande, pero la mayoría de los jardineros optan por dividir las plantas de helecho. Separar los helechos es fácil y casi siempre tiene éxito porque, a diferencia de muchas plantas perennes, los helechos y sus raíces pueden sufrir una manipulación seria.
División de helechos
El mejor momento para dividir los helechos es en primavera. Al separar un helecho, primero debes sacarlo de su maceta vieja o desenterrar el grupo. Una vez que esté afuera, cepille y sacuda la mayor cantidad de tierra que pueda. Puede que no sea mucho, ya que los helechos tienden a tener cepellones entrelazados muy apretados.
A continuación, use un cuchillo de sierra largo para cortar el cepellón en mitades o cuartos. Asegúrese de que haya hojas adheridas a cada sección y trate de mantener el número de hojas equilibrado. Las raíces de los helechos son duras y puede ser necesario un poco de trabajo para cortarlas, pero la planta puede soportarlo.
Después de separar el helecho, mueva cada sección a una nueva maceta o espacio en el jardín y rellénela con tierra que drene bien pero que retenga el agua, preferiblemente con algo de arena y mucha materia orgánica. Riega bien cada sección y continúa regando más de lo habitual mientras las plantas se establecen.