Independientemente de las condiciones actuales de su suelo, la adición de compost puede transformarlo en un medio de cultivo saludable para las plantas. El abono se puede trabajar en el suelo a mano o labrar o agregar como aderezo. También hace un mantillo adecuado.
Conceptos básicos del compostaje
Numerosos beneficios están asociados con el uso de compost:
- Puede mejorar el suelo, construyendo la estructura y textura.
- Aumenta el flujo de aire y la retención de agua.
- El compost también estabiliza los niveles de pH y es compatible con las bacterias esenciales.
- El abono permite que las plantas utilicen los nutrientes de manera eficaz para lograr un crecimiento más saludable también.
Además, la materia orgánica que se encuentra en el compost fomenta las lombrices de tierra, que también ayudan a airear el suelo. Otros beneficios incluyen el control de la erosión y la reducción de enfermedades transmitidas por el suelo.
¿Cómo funciona el compostaje?
El compost está compuesto por materiales orgánicos que se descomponen en el suelo, enriqueciendo su estructura y agregando nutrientes esenciales. Para comprender el proceso de compostaje, es útil observar el proceso de descomposición natural que se encuentra en la naturaleza. Por ejemplo, las áreas boscosas están llenas de materiales orgánicos: árboles, hojas, etc. Con el tiempo, estos materiales se descomponen o descomponen lentamente con la ayuda de microorganismos y lombrices de tierra. Una vez que los materiales se han descompuesto, se convierten en humus, elemento esencial en la producción de un suelo rico y fértil que también es responsable de producir plantas sanas.
Este proceso es similar al compostaje de jardín. Una vez que se ha producido la descomposición en la pila de compost, el resultado debe ser similar al del humus con un material oscuro, quebradizo y similar al suelo.
Haga su propio abono
Si bien las instrucciones de compostaje varían, la mayoría comparten los mismos principios básicos. Generalmente, los métodos de compostaje pasivo se utilizan con mayor frecuencia. Este método implica pequeñas pilas de abono contenido en un contenedor, recinto o contenedores de abono. Estos también varían con tamaños que oscilan entre 5 a 7 pies (1.5 a 2 m.) Alrededor y 3 a 4 pies de alto (0.9 a 1.2 m.) Sin embargo, un tamaño más manejable, especialmente para jardines más pequeños, puede no ser más grande. de 3 por 3 pies (0.9 por 0.9 m.) No obstante, es fácil adaptar su sistema de compostaje para satisfacer sus necesidades específicas.
La mayor parte del abono se compone de materiales orgánicos como hojas, plantas de jardín, periódicos, paja, recortes de césped, estiércol y restos de cocina. Los desperdicios de cocina deben incluir materiales como peladuras de frutas y verduras, cáscaras de huevo, posos de café, etc. Nunca se deben agregar productos de carne, grasa y huesos a la pila de compost, ya que pueden introducir parásitos dañinos y atraer animales.
Debes alternar capas de materiales verdes y marrones. Los artículos verdes incluyen recortes de césped y restos de cocina, que agregan nitrógeno al compost. Los materiales marrones agregan carbono a los contenedores de abono y consisten en cosas como hojas, periódicos y pequeños materiales leñosos.
La humedad y la circulación de aire adecuada son vitales para el compostaje. Por lo tanto, deben mantenerse mojados pero no empapados. Además, el compost debe girarse con frecuencia con un tenedor de jardín para ayudar a la aireación y acelerar el proceso de descomposición.
Dependiendo de los materiales utilizados y del tamaño de la pila de abono, la descomposición puede tardar desde semanas o meses hasta un año.