La alfalfa es una planta perenne de estación fría que se cultiva comúnmente para alimentar al ganado o como cultivo de cobertura y acondicionador del suelo. La alfalfa es muy nutritiva y una fuente natural de nitrógeno. Es ideal para mejorar el suelo y proporcionar control de la erosión. El extenso sistema de raíces de la alfalfa nutre tanto a las plantas como al suelo. La planta de alfalfa se ha cultivado durante generaciones y es fácil cultivar alfalfa en su jardín. Siga leyendo para aprender más sobre cómo cultivar alfalfa.
Cómo cultivar una planta de alfalfa
La alfalfa, que se cultiva y se propaga fácilmente, se adapta bien a casi cualquier jardín y tolera una amplia gama de condiciones de crecimiento. También es una buena planta resistente a la sequía, ya que no le gustan los pies mojados. De hecho, demasiada humedad puede provocar el crecimiento de moho.
Cuando cultive alfalfa, elija un área con mucho sol. También busque un área que drene bien con un nivel de pH del suelo entre 6.8 y 7.5.
Antes de plantar, debe limpiar el área, trabajar la tierra y eliminar los escombros. La semilla de alfalfa pura se puede comprar en la mayoría de las tiendas de alimentos.
Cómo plantar alfalfa
Aquellos que viven en climas más fríos pueden plantar alfalfa en primavera, mientras que las regiones más suaves deben optar por plantar en otoño. Dado que la alfalfa se enraiza rápidamente, no requiere una siembra profunda, solo alrededor de media pulgada de profundidad. Simplemente rocíe las semillas de manera uniforme sobre el suelo y cúbralas ligeramente con tierra. Use aproximadamente ¼ de libra de semillas por cada 25 pies cuadrados y separe las filas entre 18 y 24 pulgadas.
Debería comenzar a ver brotes dentro de siete a 10 días. Una vez que las plántulas hayan alcanzado entre seis y 12 pulgadas, adelgace según sea necesario para evitar problemas de hacinamiento.
A menos que cultive alfalfa como heno para el ganado, déjela crecer hasta que los cultivos estén listos para ser plantados o hasta que aparezcan sus flores púrpuras, momento en el cual simplemente puede cortarlo y labrarlo en el suelo o dejarlo. Los brotes de alfalfa se romperán. Este 'abono verde' fertilizará el suelo y estimulará la actividad microbiana, aireándolo también.
Cosecha de plantas de alfalfa
Si se planta alfalfa para el ganado, será necesario cosecharla y curarla antes de la floración (conocida como etapa de floración temprana). A estos animales les resulta más difícil digerir una vez que la planta madura. La recolección en esta etapa de floración temprana también asegura los porcentajes de nutrientes más óptimos, que a menudo se encuentran en las hojas de la planta.
No corte alfalfa si la lluvia es inminente, ya que esto puede dañar el cultivo. El clima lluvioso puede provocar problemas de moho. El heno de alfalfa de calidad debe poseer un buen color verde y frondosidad, así como un aroma agradable y tallos delgados y flexibles. Una vez cosechado, será necesario voltear el terreno antes de que se lleve a cabo la siembra de la próxima temporada.
La alfalfa tiene pocos problemas de plagas; sin embargo, el gorgojo de la alfalfa puede causar graves daños. Además, el nematodo del tallo puede infestar y debilitar las yemas del tallo.