Los arces japoneses son especímenes de árboles de paisajes espectaculares que ofrecen color e interés durante todo el año. Algunos arces japoneses solo pueden crecer de 6 a 8 pies (1.5 a 2 m), pero otros alcanzarán 40 pies (12 m) o más. Podar los arces japoneses rara vez es necesario en árboles maduros, si han sido entrenados cuando eran jóvenes.
El elegante esqueleto del árbol se acentúa con un ligero recorte durante los primeros años de vida del árbol. Aprenda a podar un arce japonés para realzar la forma atractiva de este hermoso árbol.
Cuidado y poda del arce japonés
Los arces japoneses son árboles de hoja caduca que se utilizan como especímenes ornamentales de sombra. Las plantas que están en sombra ligera y protegidas de los vientos fuertes necesitarán pocos cuidados suplementarios una vez establecidas. Las necesidades de poda y cuidado del arce japonés son mínimas, lo que hace que el árbol sea una excelente opción para la mayoría de las necesidades del jardín.
Estos árboles a menudo tienen copas bajas que se arquean de manera atractiva, o también pueden ser árboles altos y angulares con ramas esbeltas. Independientemente del tipo de arce japonés que tenga, se recomienda un recorte ligero debajo de las ramas para el acceso, ya que las ramas se caen a medida que la planta madura, y las ramas pesadas pueden crecer demasiado e incluso ejercer presión sobre el resto del árbol.
Cuándo podar un arce japonés
Hay pocas reglas sobre cómo podar un arce japonés. A finales del invierno o principios de la primavera es cuando podar un arce japonés. Este es su período de inactividad natural y el recorte del arce japonés causa menos daño durante este tiempo.
En su mayor parte, la poda de arces japoneses se limita a eliminar la madera muerta y los tallos finos, que obstruyen el hermoso esqueleto del árbol. Los árboles jóvenes necesitan que se eliminen las ramas más bajas para mejorar el espacio libre. Comience a entrenar el árbol cuando tenga dos o tres años. Quite las extremidades que se froten entre sí o que estén demasiado cerca. Pode las ramitas y ramas pequeñas en el interior del árbol. Esto ayuda a producir una forma y una silueta atractivas.
Poda de arces japoneses
Cualquier poda de árboles requiere herramientas limpias y afiladas. Las hojas afiladas crean cortes suaves que sanan mejor y causan menos traumas al árbol. Utilice un afilador durante el proceso de poda para mantener el borde de las herramientas de poda. Asegúrese de que estén limpias limpiando las cuchillas con una solución de agua y lejía ligera para evitar la propagación de enfermedades que podrían haberse adquirido de otras plantas.
La regla general, incluso en árboles viejos descuidados, es eliminar no más del 30 por ciento de la planta en cualquier año. Haga cortes lentos y cuidadosos mientras evalúa su progreso. Retroceda con frecuencia cuando recorte el arce japonés. Esto le permitirá ver todo el árbol y planificar el próximo corte para preservar y mejorar la forma natural de la planta.
Podar los arces japoneses es una tarea de bajo mantenimiento si se hace anualmente. Esto garantizará un árbol hermoso y saludable que crecerá fuerte y agregará años de belleza al paisaje de su hogar.