A pesar de no tener cerebro o sistema nervioso para advertirles del peligro, los estudios científicos han demostrado, una y otra vez, que las plantas tienen mecanismos de defensa. Las plantas dejarán caer hojas, brotes o frutos para desviar energía a la raíz y la supervivencia de la planta. Las orquídeas son plantas específicamente sensibles. Si te has preguntado "por qué mi orquídea está perdiendo brotes", continúa leyendo.
¿Qué es Orchid Bud Blast?
Cuando las orquídeas sueltan sus cogollos, se denomina comúnmente brote de cogollos. Del mismo modo, cuando las orquídeas dejan caer sus flores, se llama explosión de flores. Ambas condiciones son la defensa natural de la orquídea ante algo que salga mal en su entorno de crecimiento actual. Las orquídeas son muy sensibles a los cambios ambientales. En situaciones de estrés, dejan caer los cogollos para desviar la energía a los tallos, follaje y raíces.
La caída de las yemas de las orquídeas también puede ser un signo de riego excesivo o insuficiente. Muchas orquídeas se venden como orquídeas de "solo agregue hielo", con la idea de que al darles a estas plantas de orquídeas tres cubos de hielo cada semana, no sufrirán de exceso de agua ni de pudrición de raíces debido al suelo empapado. Sin embargo, las orquídeas también absorben el agua de la humedad del aire, por lo que en ambientes secos la caída de las yemas de las orquídeas puede ser el resultado de un riego insuficiente y poca humedad.
¿Qué causa que las orquídeas suelten capullos?
Las causas de la explosión de las yemas de las orquídeas también incluyen iluminación inadecuada, fluctuaciones de temperatura, humos o infestación de plagas.
Las orquídeas no pueden tolerar la luz solar directa brillante, pero tampoco pueden tolerar niveles de luz muy bajos. La explosión de cogollos también puede ocurrir por fluctuaciones extremas de temperatura, como corrientes de aire de ventanas abiertas, aire acondicionado, rejillas de ventilación o incluso del horno. Estar en el interior todo el invierno, y luego estar afuera en la primavera puede ser lo suficientemente estresante para una orquídea como para causar la explosión de los brotes.
Las orquídeas son muy sensibles a los contaminantes. Los limpiadores químicos, el humo de los cigarrillos o cigarros, los vapores de la pintura, las chimeneas y el escape del motor pueden provocar la caída de las yemas de las orquídeas. Incluso el gas etileno que se desprende de la fruta madura puede afectar a una orquídea.
Los humos o la deriva de herbicidas, pesticidas y fungicidas también pueden hacer que una orquídea suelte brotes en defensa propia. Por otro lado, los pulgones, trips y cochinillas son plagas comunes de las plantas de orquídeas. Una infestación de plagas puede hacer que cualquier planta también suelte brotes u hojas.