Todo el mundo sabe qué es un árbol y qué es una fresa, pero ¿qué es un madroño? De acuerdo con la información del madroño, esta es una hermosa planta ornamental de hoja perenne, que ofrece hermosas flores y frutas parecidas a las fresas. Siga leyendo para obtener consejos sobre cómo cultivar un madroño y su cuidado.
¿Qué es un madroño?
El madroño (Arbutus unedo) es un encantador arbusto o pequeño árbol que resulta sumamente decorativo en tu jardín. Es un pariente del madroño e incluso comparte el mismo nombre común en algunas regiones. Puede cultivar esta planta como un arbusto de troncos múltiples en un seto, o podarlo hasta un tronco y cultivarlo como un árbol de muestra.
Cultivo de madroños
Si comienza a cultivar madroños, encontrará que tienen muchas características deliciosas. La corteza que se desprende de los troncos y las ramas es atractiva. Es de un marrón rojizo profundo y se vuelve nudoso a medida que los árboles envejecen.
Las hojas son ovaladas con un borde dentado. Son de un verde oscuro brillante, mientras que los tallos del pecíolo que los unen a las ramas son de color rojo brillante. El árbol produce abundantes racimos de diminutas flores blancas. Cuelgan como campanas en las puntas de las ramas y, cuando son polinizadas por abejas, producen frutos parecidos a las fresas al año siguiente.
Tanto las flores como los frutos son atractivos y ornamentales. Desafortunadamente, la información del madroño sugiere que la fruta, aunque comestible, es bastante blanda y sabe más a pera que a baya. Así que no empieces a cultivar madroños esperando fresas reales. Por otro lado, prueba la fruta para ver si te gusta. Espere hasta que esté maduro y se caiga del árbol. Alternativamente, recójalo del árbol cuando se ponga un poco blando.
Cómo cultivar un madroño
Lo mejor es cultivar madroños en las zonas USDA 8b a 11. Plante los árboles a pleno sol o sol parcial, pero asegúrese de encontrar un sitio con suelo con buen drenaje. La arena o la marga funcionan bien. Crece en suelos ácidos o alcalinos.
El cuidado del madroño implica un riego regular, especialmente los primeros años después de la siembra. El árbol es razonablemente tolerante a la sequía después de su establecimiento, y no tiene que preocuparse de que sus raíces rompan las alcantarillas o el cemento.