Durante muchos años, la exploración espacial y el desarrollo de nuevas tecnologías han sido de gran interés para científicos y educadores. Si bien es divertido pensar en aprender más sobre el espacio y la colonización teórica de Marte, los verdaderos innovadores aquí en la Tierra están avanzando para estudiar más sobre la forma en que varios factores ambientales impactan la forma en que cultivamos las plantas. Aprender a cultivar y mantener las plantaciones más allá de la Tierra es de gran importancia para el debate sobre la exploración y los viajes espaciales prolongados. Echemos un vistazo al estudio de las plantas cultivadas en el espacio.
Cómo los astronautas cultivan plantas en el espacio
La horticultura en el espacio no es un concepto nuevo. De hecho, los primeros experimentos de horticultura espacial se remontan a la década de 1970, cuando se plantó arroz en la estación espacial Skylab. A medida que avanzaba la tecnología, también lo hacía la necesidad de una mayor experimentación con la astrobotánica. Comenzando inicialmente con cultivos de crecimiento rápido como mizuna, las plantaciones mantenidas en cámaras de cultivo especializadas se han estudiado por su viabilidad, así como por su seguridad.
Obviamente, las condiciones en el espacio son bastante diferentes a las de la Tierra. Debido a esto, el crecimiento de plantas en las estaciones espaciales requiere el uso de equipos especiales. Si bien las cámaras fueron una de las primeras formas en que las plantaciones se cultivaron con éxito, los experimentos más modernos han implementado el uso de sistemas hidropónicos cerrados. Estos sistemas llevan agua rica en nutrientes a las raíces de las plantas, mientras que el equilibrio de la temperatura y la luz solar se mantiene mediante controles.
¿Las plantas crecen de manera diferente en el espacio?
En el cultivo de plantas en el espacio, muchos científicos están ansiosos por comprender mejor el crecimiento de las plantas en condiciones adversas. Se ha descubierto que el crecimiento de la raíz primaria se aleja de la fuente de luz. Si bien cultivos como los rábanos y las verduras de hoja verde se han cultivado con éxito, las plantas como los tomates han demostrado ser más difíciles de cultivar.
Aunque todavía queda mucho por explorar en términos de qué plantas crecen en el espacio, los nuevos avances permiten a los astronautas y científicos seguir aprendiendo a comprender el proceso de plantar, cultivar y propagar semillas.