La pudrición por Rhizoctonia de la fresa es una enfermedad de la raíz que causa graves daños, incluida una importante reducción del rendimiento. No hay forma de tratar la enfermedad una vez que se ha establecido, pero existen varias prácticas culturales que puede utilizar para reducir los riesgos de que su parcela de fresa sucumbirá.
¿Qué es la pudrición por Rhizoctonia de las fresas?
También conocida como pudrición de la raíz negra, esta enfermedad es en realidad un complejo de enfermedades. Esto significa que puede haber múltiples patógenos que causen la enfermedad. Se han implicado varias especies de hongos, incluidas rizoctonia, pythium y fusarium, así como algunos tipos de nematodos. La rizoctonia es uno de los principales culpables y, a menudo, domina el complejo de la enfermedad.
Los signos más visibles en la superficie de las fresas con hongos rizoctonia y podredumbre negra de la raíz son la falta general de vigor, el crecimiento limitado de los corredores y las bayas más pequeñas. Estos síntomas no son infrecuentes para otras enfermedades de las raíces, por lo que para determinar la causa, es importante mirar debajo del suelo.
Bajo tierra, en las raíces, la rizoctonía en las fresas se muestra como áreas negras podridas. Pueden ser solo las puntas de las raíces o puede haber lesiones negras en todas las raíces. Al principio de la progresión de la enfermedad, el núcleo de las raíces permanece blanco, pero a medida que empeora, la podredumbre negra atraviesa las raíces.
Prevención de la infección por hongos Rhizoctonia de la fresa
La pudrición de la raíz negra es compleja y no existe un tratamiento que salve las fresas afectadas. Es importante utilizar prácticas culturales para prevenirlo. Use solo plantas saludables cuando comience un parche de fresas. Revise las raíces para asegurarse de que estén todas blancas y que no haya signos de pudrición.
El exceso de humedad también favorece esta enfermedad, así que asegúrese de que su suelo drene bien (alternativamente puede usar camas elevadas) y que sus fresas no se regen demasiado. La enfermedad es más frecuente en suelos húmedos y bajos en materia orgánica, así que agregue abono antes de plantar fresas.
Las plantas de fresa que están estresadas, no reciben suficientes nutrientes o han sido dañadas por plagas, incluidos los nematodos, son más susceptibles a la pudrición de la raíz negra. Mantenga una buena salud de las plantas evitando las heladas o el estrés por sequía y controlando los nematodos en el suelo.
Los cultivadores comerciales de fresas pueden fumigar el suelo antes de plantar para evitar la pudrición de la raíz, pero esto no se recomienda para los cultivadores caseros. Las buenas prácticas culturales deben ser adecuadas para una buena cosecha y una enfermedad mínima.