El uso de jardines para enseñar ciencia es un nuevo enfoque que se aleja de la atmósfera seca del aula y salta al aire libre. Los estudiantes no solo se convertirán en parte del proceso de aprendizaje, sino que también apreciarán las habilidades que aprenden y disfrutarán de los alimentos saludables que cultiven. La enseñanza de la ciencia en el jardín brinda a los maestros una oportunidad única de mostrarles a los niños la biodiversidad y los ritmos naturales de la vida.
Para muchos estudiantes, la escuela puede ser un ejercicio aburrido pero necesario en el que prestar atención y retener información se convierte en una tarea tediosa. Cuando un maestro activo decide enseñar ciencia a través de la jardinería y la experiencia práctica, encontrará estudiantes más comprometidos con una alta tasa de participación voluntaria.
Uso de jardines para enseñar ciencia
Los niños pueden aprender química a través del compostaje, biología a través de la interacción con los organismos que encuentran, los procesos cuantitativos y cualitativos a través de la plantación y el manejo de semillas, la ecología a medida que se vuelven parte del medio ambiente, las ciencias de la vida mientras ven crecer una semilla y los estudios de meteorología y clima a través de su evaluación del clima y sus efectos en el jardín.
A todos estos atributos se unen otros dos en jardinería y ese es el gozo de la creación y el trabajo duro. Es una combinación beneficiosa para profesores y estudiantes. El enfoque práctico es un método atractivo de informar y enseñar ciencia en el jardín y proporciona un excelente ejemplo de dicho método.
Actividades científicas de jardinería
Hay numerosas actividades científicas de jardinería. Lo más obvio y divertido es plantar alimentos y verlos crecer. También puede impartir lecciones a través de actividades como compostaje y vermicompostaje.
Los estudiantes mayores pueden realizar pruebas de pH del suelo, investigar los efectos de diferentes nutrientes en las plantas y aprender métodos de conservación para sus cultivos, como enlatar o conservar. A los pequeños les encanta ver brotar las cosas, participar en batallas de insectos y, en general, ensuciarse mientras se acercan a la naturaleza. Todas las edades aprenderán lecciones importantes sobre nutrición y salud a medida que prosperen los proyectos.
Planificación para enseñar ciencias en el jardín
No es necesario tener un área al aire libre para enseñar ciencias en el jardín. Las plantas en macetas, las semillas planas y los vermicompositores de interior proporcionan tanto aprendizaje como el aire libre. Mantenga los proyectos simples y rápidos para los pequeños estudiantes y tenga un plan de lecciones antes de cada visita al "jardín" con preguntas y respuestas listas para mostrarles a los niños lo que se supone que deben obtener de la actividad.
Infórmese para que usted y los niños obtengan el máximo beneficio de la actividad. Pídale a un jardinero que le ayude si tiene un "pulgar negro" y tiende a hacer que las plantas mueran. Obtener los beneficios de la investigación al aire libre y el aprendizaje en el jardín hará que las cosas sean divertidas y emocionantes tanto para el maestro como para los estudiantes.