Si alguna vez ha cocinado cocina asiática, particularmente tailandesa, es muy probable que haya comprado hierba de limón en la tienda de comestibles. ¿Pero sabías que si compraste limoncillo una vez, no deberías tener que volver a comprarlo nunca más? El limoncillo es una de esas plantas maravillosas: sabe muy bien, huele muy bien y, cuando la cortas, la planta vuelve a crecer. Como una gran ventaja, puede cultivarlo directamente de los tallos que compra en la tienda de comestibles. Siga leyendo para aprender sobre el cuidado de las plantas de limoncillo de interior y cómo cultivar el limoncillo en interiores.
¿Se puede cultivar limoncillo en interiores?
¿Puedes cultivar limoncillo en interiores? ¡Absolutamente! De hecho, cultivar limoncillo en interiores es una necesidad en climas más fríos, ya que el limoncillo cultivado al aire libre no sobrevivirá al invierno. Si puede encontrar hierba de limón a la venta en su supermercado, cómprela. Elija los tallos con los centros más verdes y los bulbos aún intactos en la parte inferior.
Colócalos, con el bulbo hacia abajo, en un vaso con unas pocas pulgadas (7.5 cm.) De agua. Déjelos reposar durante algunas semanas, cambiando el agua con frecuencia, hasta que comiencen a crecer nuevas raíces. Si está cultivando limoncillo en interiores, deberá elegir el recipiente adecuado.
El limoncillo se extiende y crece hasta unos pocos pies de altura, así que elija un recipiente que sea lo más grande que pueda tener en su casa. Asegúrese de que tenga amplios orificios de drenaje. Llene el recipiente con mezcla para macetas y agua hasta que esté húmedo pero no mojado.
Haz un agujero en el centro de la mezcla para macetas. Recorte la parte superior de los tallos y coloque un tallo, suavemente, en el agujero. Llene la mezcla para macetas alrededor y coloque la planta en un lugar soleado para que crezca.
Cómo cultivar limoncillo en interiores
El cuidado de las plantas de limoncillo de interior es fácil y productivo. Al plantar limoncillo en macetas, una de las mejores cosas que puede hacer por su planta es cosecharla con frecuencia, ya que esto fomenta un nuevo crecimiento.
La cosecha implica cortarlo con un cuchillo afilado al ras de la superficie del suelo. Tendrá un tallo entero para cocinar o secar, y el bulbo producirá inmediatamente un nuevo crecimiento.
Mantenga su maceta a pleno sol; si hace suficiente calor, déjela afuera. Riegue y fertilice con frecuencia. Si comienza a crecer demasiado para su maceta, puede trasplantar o cosechar algunos tallos, con bulbo y todo, para cocinar o trasplantar en otro lugar.