¿Busca un tomate sabroso y de piel suave que prospere en la mayoría de los climas? Intente cultivar tomates Better Boy. El siguiente artículo contiene toda la información pertinente sobre los tomates Better Boy, incluidos los requisitos de cultivo de Better Boy y sobre el cuidado de los tomates Better Boy.
Información de Better Boy Tomato
Better Boy es un tomate híbrido de mitad de temporada que es extremadamente popular. Las plantas se adaptan fácilmente a una variedad de condiciones y producen de manera confiable frutas con el clásico sabor a tomate. Maduran en aproximadamente 70-75 días, lo que los convierte en una excelente opción para una variedad de zonas del USDA.
Los tomates Better Boy son resistentes tanto al verticillium como al marchitamiento por fusarium, una de las claves de su popularidad. Otra cosa buena de cultivar tomates Better Boy es su denso follaje. Este espeso follaje protege la delicada fruta de las quemaduras solares.
Los tomates Better Boy son indeterminados, lo que significa que deben cultivarse en jaulas o al estilo tipi con estacas. Debido a su gran tamaño, de 5 a 8 pies (1.5 a 2.5 m) de altura, los tomates Better Boy no son adecuados para contenedores.
Cómo hacer crecer a un niño mejor
Los requisitos de cultivo de Better Boy son similares a los de otros tomates. Prefieren suelos ligeramente ácidos (pH de 6.5 a 7.0) a pleno sol. Plante tomates Better Boy después de que haya pasado todo el peligro de las heladas en su área.
Empiece a plantar entre 6 y 8 semanas antes de plantar en el exterior. Coloque las plantas a 36 pulgadas (poco menos de un metro) de distancia para permitir la aireación, facilitar la cosecha y darles espacio para crecer.
Cuidando los tomates Better Boy
Aunque los tomates Better Boy muestran resistencia a las enfermedades, es mejor rotar el cultivo.
Utilice estacas u otros soportes para mantener las plantas en posición vertical. Pellizque los brotes y brotes tempranos para estimular un crecimiento vigoroso.
Agregue un fertilizante o abono balanceado 10-10-10 al suelo a mitad de temporada. Riegue consistentemente pero no riegue en exceso. El riego constante minimizará la incidencia de rotura de la fruta y pudrición final.