Los tomates secados al sol tienen un sabor dulce único y pueden durar mucho más que los tomates frescos. Saber cómo secar los tomates al sol lo ayudará a preservar su cosecha de verano y a disfrutar de la fruta hasta bien entrado el invierno. Secar los tomates no cambia ninguno de los beneficios nutricionales de la fruta, con la excepción de la pérdida de algo de vitamina C. El sabor añadido y la facilidad para almacenar los tomates secos son los beneficios del proceso de conservación.
Cómo secar tomates
El secado de tomates no requiere ningún equipo especial, pero es más rápido si se hace en un deshidratador o en un horno. Las frutas deben blanquearse para quitar la piel, que retiene la humedad y prolonga el tiempo de secado. Sumerge los tomates en agua hirviendo durante 30 segundos y luego sumérgelos en un baño de hielo. La piel se pelará y podrá cortarla.
Al elegir cómo secar los tomates, tenga en cuenta su clima. Si vive en un clima cálido y soleado, puede secarlos al sol, pero la mayoría de los jardineros tendrán que colocarlos en una fuente de calor para que se sequen por completo.
Secar tomates en el horno
En la mayoría de las áreas, secar las frutas al sol no es una opción. En estas áreas, puede usar su horno. Corte la fruta en gajos o rodajas y colóquela en una sola capa sobre una bandeja para hornear galletas con un rastrillo para asar o hornear para mantener la fruta fuera de la bandeja. Ponga el horno a 150 a 200 F. (65-93 C.). Gire las hojas cada pocas horas. El proceso tomará de 9 a 24 horas dependiendo del tamaño de las piezas.
Cómo secar tomates en un deshidratador
Un deshidratador es uno de los métodos más rápidos y seguros para secar frutas y verduras. Las rejillas tienen espacios para que el aire fluya y están colocadas en capas. Esto aumenta la cantidad de aire y calor que puede entrar en contacto con los tomates y disminuye las posibilidades de decoloración o incluso moho.
Corte los tomates en rodajas de ¼ a 1/3 de pulgada de grosor y colóquelos en una sola capa sobre las rejillas. Sécalos hasta que las rodajas estén correosas.
Cómo secar tomates al sol
El secado al sol de los tomates agrega un matiz adicional a su sabor, pero no es una técnica de conservación recomendada a menos que se encuentre en un área de alta temperatura y baja humedad. Si los tomates tardan demasiado en secarse, se enmohecerán y la exposición al exterior aumentará la posibilidad de bacterias.
Para secar los tomates al sol, escaldarlos y quitarles la piel. Córtelos por la mitad y exprima la pulpa y las semillas, luego coloque los tomates en una sola capa sobre una rejilla a pleno sol. Asegúrese de que haya un flujo de aire de un par de pulgadas debajo de la rejilla. Gire los tomates todos los días y lleve la rejilla adentro por la noche. El proceso puede tardar hasta 12 días.
Almacenamiento de tomates secos
Use recipientes o bolsas que sellen completamente y no permitan que entre humedad. Lo mejor es un recipiente opaco o recubierto, ya que evitará que la luz entre y reduzca el sabor y el color de los tomates. Almacenar correctamente los tomates secos le permitirá utilizarlos durante meses.